jueves, 26 de noviembre de 2009

BRUSCO NO!!!

A propósito del Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer, este es una oportunidad para declarar públicamente que no debemos ejercer ninguna práctica que violente, maltrate o atente contra la dignidad de las mujeres, el camino ha sido largo, hemos tenido que desaprender hábitos que provienen de estereotipos machistas y hasta en ocasiones podemos sentirnos culpables de ejercer algunas formas de agresión contra ellas.

Elevo una plegaria a las diosas Isis, a Minerva, a Kalí, a Bachué, a la Pachamama, a Genzera o a Afrodita, también a Bastet, a Ixchel, a Coatlicue,a Ochún o a Bachué; a Artemisa,a Itzpapalotl, a Kualeku, a Pulowi, a Huitaca, a Pakoré, a Palas Atenea, también a Santa Bárbara, a Chía, a la Virgen de la Macarena, o a la mismísima Venus, todas ellas que nos miran desde sus bien barridos, perfumados y ordenados paraísos, para que nos iluminen cada vez que siquiera se nos ocurra lastimar con pétalos de rosas tan hermosas obras de la creación.

Para que si nos enojamos con ellas salgamos corriendo de la casa, vayamos a esos bares donde sirvan cocteles que nos hagan olvidar el enojo, nos distraigamos, nos relajemos, nos tiremos lo que no tenemos y volvamos a la casa sin ganas de discutir, o en un estado que si ellas nos dicen algo, no nos importe.

Para que todas esas canciones que hablen de matarlas, ese poco de rancheras, de música de carrilera, de cortadas de venas y de golpes y más golpes, sean sacadas de los transistores de los celadores.

Para que los actores no le peguen a las actrices en ningún culebrón de los que pasan en televisión, (y si les pegan, que sea de mentiras).

Para que ninguno de estos “guaches” sea capaz de agredirlas con propósitos sexuales, no tiene gracia, eso sí es de pésimo gusto, así sea en la guerra o en la paz, en un sitio "bien", en un antro, en la calle o en un remoto caserío en el Vichada; los que creen que eso es ser varón están en el paleolítico.

Para que cada vez que esos obscenos amigotes nos envíen esos correos electrónicos de mujeres en cueros, quemadas por el sol y sufriendo en esas playas solitarias o en repugnantes piscinas llenas de cloro, no se nos pase siquiera por el pensamiento cogerlas a nalgazos por estar andar así desprotegidas, sin saber que puede aparecer de repente un sátiro por ahí detrás de cámaras.

Para que entendamos de una vez por todas que su fortaleza tienen que ahorrarla para concebir sus los hijos, para sembrar la tierra, para cuidar de la familia y para caminar muchos kilómetros cuando van de compras.

Para que nos demos cuenta que su inteligencia es vital para tomar decisiones sabias en la crianza de sus hijos, para hacer memoria minuciosa de todo lo que les conviene, para parquear en reversa y para combinar la ropa.

Para asumir que no podemos hacer nada que les duela, ni caerles encima, -se debe revisar el Kamasutra y decretar el ajuste o abolición de ciertas prácticas, esto también lo digo por nosotros, una mala fuerza y nos jodemos… la columna vertebral-.

Para que entendamos que nada de empujones así sea “pogueando” que nada de patadas así sea por debajo de la mesa, que nada de mordiscos si no estamos vacunados, puños ni siquiera para apretar manojos de margaritas.

Para que la fuerza la brindemos para ayudarles a correr escaparates, para cargar sus paquetes, sus bultos, los canastos con productos de la tierra, y los afectos para ofrecerles perolados de sonrisas y madejas de luna.

Para que todas estas diosas se amangualen para impedir que sus “patojitas” sean amenazadas con cuchillos, pistolas o utensilios contundentes como secadores de cabello, para impedir que sean ultrajadas, para que ese salvajismo que tenemos, unos más que otros se espante de la faz del planeta, bueno, podemos empezar por el barrio, o por la cuadra, o por la cama…

Para que dejemos ya la patanería, como decía mi mamá. Es también un motivo para, de mil amores, ofrecer disculpas, y que no lo vuelvo a hacer……

Sus comentarios los pueden hacer a megaspar@hotmail.com

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